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Chiapas visto por Pedro Casaldliga: 4s5n4n
"Comprendemos al pueblo
desesperado que decide levantarse en armas": el obispo Casaldliga.
Por Rodrigo Vera
Sao Felix do Araguaia, Brasil. "El conflicto
chiapanero es una gran advertencia a la iglesia centralista
latinoamericana y a los gobiernos neoliberales de la zona: es la irrupcin
de la presencia indgena que haban querido negar", afirma Pedro
Casaldlig a, obispo de esta prelatura y uno de los mximos
representantes de la Teologa de la Liberacin.
Nadie mejor que este misionero claretiano de cuerpo
afilado y ojos caf verdosos para comprender el conflicto en Chiapas.
Al igual que Samuel Ruiz, obispo de San Cristbal de las Casas, Casaldliga
ha sufrido la represin, las amenazas de muerte, las acus aciones de
guerrillero y el hostigamiento del Vaticano por su defensa de la causa
indgena.
En esta pequea comunidad, situada en los mrgenes
del ro Araguia y al inicio de la selva amaznica, Casaldliga
agrega:
"Cuando el pueblo toma la decisin de levantarse
en armas, nosotros respetamos y comprendemos su gesto desesperado. Los
pueblos indgenas saben sufrir en silencio. El movimiento en Chiapas
demuestra que la fuerza indgena del continente es mucho mayor de lo
que se haba pensado. Mxico debe gloriarse de ser indgena".
Y asegura convencido:
"Mientras haya pobres y marginados, y mientras
exista el Evangelio, habr Teologa de la Liberacin. Slo
desaparecer el da que no quede a quin liberar".
- A la Teologa de la Liberacin se le daba por
muerta con el derrumbe del socialismo en los pases de Europa del Este.
Demostr su vigencia en Chiapas?
- La Teologa de la Liberacin apenas est naciendo.
Slo ha muerto para los desinformados o los ignorantes. Apenas tiene 20
aos de estructuracin, nada comparado con los veinte siglos que tiene
la Iglesia Catlica. Lo que sucede es que hay muchos int eresados en
ahogarla en plena etapa de gestacin.
Abunda: "La Teologa de la Liberacin se ha
presentado de manera unilateral como si fuera slo de carcter poltico
y no espiritual. Las dictaduras militares, y ahora el pensamiento
neoliberal, la limitan slo a su aspecto social. Sin embargo, libera
del pecado a nivel personal y de conciencia; libera de la esclavitud a
nivel de estructuras sociales y, finalmente, de la muerte, esa ltima
esclavitud vencida por la resurreccin.
"Esta corriente teolgica es el pensamiento
cristiano acerca de Dios, pero a partir de las exigencias de la liberacin.
Se ha enfrentado contra las manifestaciones de la esclavitud y la
injusticia. Ha dado nfasis a lo social. Ha nacido de los pasos del m
ismo pueblo, de su sufrimiento y de su sangre, no de las ctedras
universitarias. Los telogos sistematizaron ese grito y esa violencia.
"La Teologa de la Liberacin abre a las
reivindicaciones culturales de nuestros pueblos, oponindose al
militarismo y despus al neoliberalismo. Lucha contra el centralismo
eclesistico y el etnocentrismo, que ms exactamente es eurocentrismo.
Es una teo loga con los pies en el suelo, pecho a pecho con el pueblo.
A la luz de la fe, vive el drama de la injusticia".
- Se le achaca que aprueba la violencia y el
recurso de las armas.
- Mentira! Siempre hemos estado contra la violencia.
Prueba de ello es nuestra vocacin de mrtires, no de guerreros. Yo
estoy a favor de la paz. Nunca voy a usar un arma. Es ms, no s cmo
usarla.
Casaldliga seala las ventanas y puertas de su
casa, abiertas a la calle, abiertas al patio sombreado por un enorme rbol,
bajo el cual hay una capilla descubierta, con una cruz multicolor en su
altar. Suele orar ah todas las maanas. El aire sopla con libertad
por la pequea casa de ladrillo y de teja.
Afuera, con pantalones cortos, los lugareos circulan
en bicicleta. Ms all, algunos reman o se zambullen en las aguas del
ancho Araguia.
"Mire -dice- a m pueden matarme cuando les d
la gana. Mi casa est abierta a todo mundo. Me han ofrecido
guardaespaldas y siempre los he rechazado. Al luchador social Chico Mndez
lo cuidaban guardaespaldas y ya ve, as lo mataron. Yo me he impuesto
un pacifismo total.
"Sin embargo, no puedo decirle a un padre de
familia que se cruce de brazos mientras ve cmo acribillan a su esposa
y a sus hijos. Quienes nos censuran olvidan que la primera violencia es
la institucionalizada. Esto fue lo que advirti Samuel Ruiz, denunc i
la opresin cultural y tnica. No le hicieron caso y ahora qued
entrampado en la boca del volcn".
Al gobierno le estall Chiapas
Casaldliga ve a Chiapas como la prolongacin
centroamericana de la represin, la marginacin, el militarismo y la
revuelta indgena:
"Es un estado muy conflictivo, muy
centroamericano. Desde 1986 he estado visitando los campamentos de
refugiados guatemaltecos en Chiapas. Cada ao viajo a Centroamrica y
no encuentro ninguna diferencia con Chiapas. Me sorprenda que los
gobernantes de M xico, producto de una dictadura partidista que ya
lleva muchos aos, no vieran que ese neoliberalismo concertado con
Estados Unidos fuera a afectar a ese pueblo pobre. La raz del
estallido est ah. En una reforma agraria que ha quedado slo en
papel; e n miles de nios chiapanecos muertos por enfermedades curables,
en la decapitacin de liderazgos regionales; en tantas y tantas
detenciones arbitrarias.
"Mxico quiso medir su democracia basndose en
gran parte en el control de la inflacin. Hoy le lleg la hora de
imponerse una democracia a fondo: econmica, poltica, cultural. El
aplastamiento militar y la represin no sern la solucin. Tampoco
las mer as promesas de la politiquera corrupta. Este brote armado
cambi todo".
- Un sector del gobierno acusa a Samuel Ruiz de
conocer la preparacin del movimiento y, sin embargo, no haberlo
denunciado.
- Acaso el ejrcito no lo saba mejor que don
Samuel? Este, cuando menos, denunci las causas y ahora reprueba los mtodos
del ejrcito zapatista. La carta que le entreg al Papa fue proftica.
Cuando se les tena prohibido gritar, Samuel Ruiz se hizo la voz de sus
comunidades indgenas, ha estimulado sus esperanzas. Luego de 500 aos,
la situacin en San Cristbal de las Casas sigue igual. Las mismas
denuncias de Fray Bartolom de las Casas las retoma Samuel Ruiz.
Dignamente hered la misma sede epis copal.
Con Toms Balduino, obispo de Goias y durante muchos
aos presidente del Consejo Indigenista Misionero (CIMI), de Brasil, y
el benedictino Heriberto Hermes, obispo de Cristalandia, Casaldliga
viajar a Mxico a ofrecer personalmente su apoyo al obispo Sa muel
Ruiz. Participar, adems, en la reunin del Secretariado
Internacional Cristiano de Solidaridad con Amrica Latina (SICSAL), que
se efectuar en la ciudad de Mxico, del 4 al 8 de febrero.
Actualmente Samuel Ruiz y Casaldliga ocupan, respectivament e, la
presidencia y vicepresidencia del SICSAL, fundado por el obispo Sergio Mndez
Arceo en 1980.
De 66 aos, oriundo de Barcelona, Espaa, y autor de
ms de 30 libros sobre teologa, espiritualidad, crnicas de viaje y
poesa, Pedro Casaldliga destaca entre los obispos brasileos
defensores de la Teologa de la Liberacin, entre los que se encuentra
n el cardenal Pablo Evaristo Ams, arzobispo de So Paulo, Alofsio
Lorscheider, cardenal y arzobispo de Fortaleza; Jos Mara Pires, de
Joo Pesa, Paraiba; Antonio Fragoso, de Crateus, en el Estado de Cear,
y el propio Toms Balduino.
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